El día anterior a mi cumpleaños, estaba paseando por las fucking ruidosas y sucias calles de mi barrio, al no soportar mas, decidí meterme calles adentro para volver mas tranquilo a mi casa. Cuando en un abrir y cerrar de ojos, se me aparece alguien caminando a mi lado, un hombre Negro, de traje blanco, mi misma estatura, un candado envolviendo su boca, con una forma muy demoníaca, ojos de gato, y con fuego envolviéndolos. Me ofreció todo su poder en este mundo, para poder vivir lo que yo quisiera y como quisiera. Pero algo raro tenía que tener todo esto. Le pregunte que es lo que quería a cambio, al cual su respuesta, muy convencida fue:
- Nada.
- Como es que no quieres nada, si me estas ofreciendo tu vida.
- Mira muchacho, no todo en la vida es el tiempo, el tiempo es bueno, pero no a largo plazo. Yo te ofrezco mi vida, para que veas y lo compruebes tu mismo.
- Pero de que me sirve, si me está diciendo que es malo, porque tendría que aceptar su propuesta.
- Eres muy sabio muchacho, pero te sigo ofreciendo mi eternidad, para que puedas hacer todo lo que tu quieras, si quieres estar con alguien, puedes, si vas a algún lugar y quieres algo que no está a tu alcance, lo tendrás, quieres viajar a tu lugar favorito del mundo, lo puedes hacer cono un solo chasquido de tus dedos. Voy a darte un tiempo, para que lo pienses, siento en ti que no duraras mucho en este mundo muchacho.
- Disculpe, pero gracias a su mirada, no me causa daño ni dolor, no me causa intriga por saber quien es, no me da las esperanzas que tendría al aceptar semejante oferta. Se nota que el tiempo no sirve. Cómo alguien como usted, con una mirada tan fuerte y poderosa, con siglos viviendo en estas tierras, no sabe leer un par de ojos. No existen palabras, para lo que pueden decir, no hace falta, solo necesitas encontrar aquella persona que entiende esto y sabe como tratarte, el silencio acompañado de tus ojos, puede ser mas que millones de palabras, si las palabras entran por un oído y salen por el otro. Usted podría solo observar y ofrecérselo a alguien que le pareciera una mejor vida. A mi no me gusta tomarme tiempos, no sirven, solo te hacen olvidar, yo las decisiones las tomo ahora, el único tiempo que me tomo, es para pensar unos minutos mi respuesta, pero la verdad esta en los ojos, pero obviamente hay mucha gente como usted, que no sabe leerlas, entonces uno tiene que tomarse ese tiempo para poder responder lo mismo que ellos quieren.
- Muchacho, me ha dejado con la boca abierta, se lo digo de nuevo, eres demasiado sabio. Todas las respuestas las tienes en tus hermosas palabras, tienes todo, sabes lo que quieres, y eso es lo que vale, y tienes toda la razón, como te dije, “el tiempo a largo plazo no sirve”, es un estorbo para tus pensamientos. Cómo puedes tomarte un tiempo para decidir sobre algo, si en el mundo en el que vivimos, pasan cosas por nuestra cabeza cada segundo, todo se mezclaría si nos tomamos ese tiempo largo, que al final nunca acaba. Solo hay una cosa que me queda saber de ti muchacho. ¿Tú no eres uno mas de estas personas que tienes a tu alrededor no? Tú vienes de otro lado.
- Esa respuesta la dejo a su criterio. Yo no digo quien soy, solo haz lo que te dije y sabrás quien soy.
- Has sido tocado con la varita muchacho, te daría mis ojos para que puedas mejorarlos, ya están viejos de tanto observar, y de tanto esforzarse para ser como tú. Suerte muchacho, si me necesitas, piensa en mí.
- Muchas gracias, e igualmente, sus palabras también han sido sabias. “Piensa y Observa”.
Tú que piensas. ¿Cómo ves esto? Que te parece. Tomarías tiempos a largo plazo. O eres de los míos.
No tomarse tiempos, a veces puede ser malo, pero eso pasa solo si te está pasando algo en ese momento, en el cual confundes lugares y momentos, cosas que pasan, y eso puede llevarte a no actuar como deberías o quisieras. Eso aleja tu mente de tu cuerpo, no son uno, solo son varias personas en un cuerpo, tratando de escapar por donde puedan, y salen por tus palabras, y siempre sale la incorrecta.
Todos nos equivocamos, todos tenemos errores, para eso existe la palabra “Perdón”.
No tengo mas que decir, solo que este es el final de mi historia, mi historia no sigue hasta que no haya mucho porque contar.
Los dejo con mis escritos, cuentos, canciones, cartas y demás.
Os Saluda El Conde Vlad